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¿Visión borrosa? Podría ser un síntoma del ojo seco
Al detectar la presencia de visión borrosa lo primero que cruza nuestra mente puede ser que necesitamos anteojos o un aumento en la graduación si es que ya los utilizamos y si bien estos pueden ser escenarios factibles, no debemos descartar que este suele ser de los principales síntomas del síndrome del ojo seco.
Es cierto que en muchas de las afecciones visuales se presenta una visión borrosa y debido a ello se suele atender como un problema aislado sin solicitar un diagnóstico completo al visitar a nuestro especialista en ojos y al no tratarse a profundidad, después de un tiempo, esta molestia puede regresar.
En el caso del ojo seco, este síntoma suele acompañarse de algunos otros como la sensibilidad a la luz, sensación de arenilla dentro del ojo, ojos rojos, ardor y/o picazón; dependerá de lo que en nuestro caso particular esté generando el problema de resequedad ocular, tanto los síntomas como su tratamiento.
Recordemos que el síndrome del ojo seco se presenta cuando la película lagrimal falla en cantidad o calidad, haciendo que nuestros ojos no puedan mantener una humectación adecuada y por ende, no pueden tener un funcionamiento adecuado, es por esto que no sorprende que empecemos a tener problemas de visión o visión borrosa como resultado de la resequedad ocular llegando incluso a la pérdida de la visión.
Si este es tu caso no te alarmes de más, el síndrome de ojo seco puede tratarse y es reversible atendiendose a tiempo, por ello, en estos tiempos en que pasamos demasiado tiempo frente a las pantallas ya sea trabajando o por entretenimiento, debemos estar más atentos a cualquier cambio que notemos en nuestra visión para que podamos acudir con nuestro especialista de la salud visual y determine cuál es el tratamiento a seguir para nuestra situación particular, así que ya lo sabes, hoy más que nunca es importante que cuidemos de nuestros ojos para poder desempeñar nuestras actividades sin dificultades.
